¡Queremos creps, muuuuchas creps!
Siempre es un buen momento para hacer creps y los findes son chulos para compartir momentos con la familia. Si le decimos a la yaya mimi que hacemos creps, viene volando, y con lo poquito que nos estamos viendo últimamente… (cachis con el covid, echamos de menos a los abuelos y ellos a su nieta…)
Así que, mascarilla puesta y, mano a mano, las han hecho entre las dos… no hay receta más sencilla y que se pueda disfrutar tanto 🙂
Esta receta no podía faltar en la cajita de “el juego de los desayunos”
ingredientes:
1 huevo de gallina feliz (ideal del 0, su cría es más respetuosa y la calidad nutricional de las grasas también)
125g de harina de espelta integral (o cualquier otra que sea integral, la de espelta o kamut queda genial en pastelería)
250g de bebida de avena (sin aceite refinado ni azúcar ni cualquier otra cosa innecesaria)
1 pellizquín mini de sal
empezamos:
•en un bol trituramos el huevo, los 125 de harina de espelta integral, los 250g de leche y el pellizquín de sal hasta conseguir una masa homogénea (también lo podemos hacer a mano con unas varillas, si las hacemos con niños es más diver así 🙂 )
•engrasamos una sartén con aceite de oliva virgen extra (pasamos un papel para quitar el exceso) y calentamos
•ponemos un poco de masa y rápidamente la extendemos por la sartén (volteando la sartén)
•esperamos a que cuaje y se dore y luego giramos para que se acabe de hacer por el otro lado
•las dejamos enfriar en un plato y si nos sobran las podemos guardar en un tupper en la nevera y calentarlas cuando vayamos a comerlas
•si las queremos hacer saladas entonces las podemos hacer con leche de vaca o bien con una bebida vegetal que no sea dulce
Salen 6 creps grandotas
Aquí os dejamos la receta en formato jpg por si os apetece descargarla
Muchísimas gracias por acompañarnos 🙂
¡que tengáis una día con eSe!
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