¿bizcochito sin gluten?
pues aquí lo tenemos. Otro clásico de los cumples saludables en coneSe cuando necesitamos un bizcocho sin gluten. O cuando nos apetece un bizcocho sabrosón, jugosito…
Me gusta mucho hacerlo en molde cuadrado tipo bizcocho de toda la vida y es genial para cortar en porciones y congelar, así siempre tenemos a mano una alternativa más para un desayuno o merienda rápida (que a veces el pim pam te da la vida jeje)
Y si lo queremos para cumple, ¿qué os parece si le ponemos unas mariquitas de fresa encima?
¿hace?
ingredientes:
4 huevos de gallina feliz (ideal del 0, su cría es más respetuosa y la calidad nutricional de las grasas también)
150g de dátiles medjool, pesados ya sin el hueso (es una variedad que no aporta ni azúcares ni aceites refinados y que van súper para la pastelería ya que tienen más carne y menos piel y el sabor es clavadito al del azúcar moreno)
100g de aceite de oliva virgen extra (siempre virgen extra, aporta calidad nutricional y saborrrr)
100g de bebida de avena (la avena hace que quede más dulzón)
160g de copos de avena finos (vamos a asegurarnos que sean certificados sin gluten)
40g de almendra molida
20g de levadura (los sobres acostumbran a ser de 16g)
la ralladura de un limón grande
¡empezamos!:
•forramos el molde con papel vegetal para que no se nos enganche
•precalentamos el horno a 180 grados arriba y abajo
•en un bol trituramos los 150g de dátiles medjool pesados sin el hueso con los ingredientes líquidos para que se deshagan bien: los 4 huevos, los 100g de leche y los 100g de aceite hasta que quede bien fino y espumoso.
•añadimos los 160g de copos de avena finos, los 40g de almendra molida y los 20g de levadura y seguimos triturando. Una vez tengamos la masa homogénea le queda genial añadir la ralladura de un limón grande y mezclar con una espátula (no triturar, así se nota mucho más el sabor fresco del limón)
•horneamos durante 30 minutos (depende de el tipo de molde y horno cambiará el tiempo de cocción, éste lo hemos hecho con el molde cuadrado de 24×24)
Si nos apetece congelar el bizcocho para tenerlo siempre a mano, una vez frío, lo cortamos en porciones y lo ponemos en un tupper al congelador. Cuando queremos comerlo, únicamente tendremos que sacar el trozo y dejarlo descongelar unos 15 minutos o bien darle un toque de micro. También podemos poner papel de horno entre capa y capa para que no se enganchen, aunque así como se ve en la foto también va bien 🙂
Aquí os dejamos la receta en formato jpg por si os apetece descargarla
Muchísimas gracias por acompañarnos 🙂
¡que tengáis una día con eSe!
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